Un café para conocer,
un chocolate para reconfortar,
un vino para enamorar,
un mate para compartir,
un té para estimular;
aunque al final no es nada de eso,
son solo ellos, que hasta con agua encienden sus fuegos.
Agua, agua, agua para vivir.
Un café para conocer,
un chocolate para reconfortar,
un vino para enamorar,
un mate para compartir,
un té para estimular;
aunque al final no es nada de eso,
son solo ellos, que hasta con agua encienden sus fuegos.
Agua, agua, agua para vivir.